Currículums de éxito (II): detalles que te harán brillar

[20.04.2012]

Estructura precisa, un buen diseño y, sobre todo, adecuación a la oferta, son algunas de las claves que distinguen al currículum ganador.

“He enviado cientos de currículums y no he conseguido una sola entrevista”, hemos oído decir alguna vez. “Me llegan cientos de currículums y muy pocos captan mi atención” podrían decir desde el otro lado. Éstas son algunas formas de multiplicar la eficiencia de tu búsqueda.

Diseño, diseño, diseño

La página es una primera impresión y debe ir vestida para la ocasión.  Ya contamos la importancia de arrancar con brillantez, con una ficha que resuma nuestros mejores activos, nuestro objetivo y forma de contacto. Presentar todos los datos del currículum con una estructura clara, con bloques bien delimitados y una apariencia impecable es básico para que nuestra historia profesional entre por los ojos. Cuida especialmente:

  • Tipografía: decídete por una letra que se lea bien en el ordenador (lo ideal es una letra sin serifa, arial o verdana, porque las ’times’ son bastante molestas en pantalla), con un tamaño adecuado. Evita las cursivas (se leen peor), y utiliza las negritas (bold) para destacar tus mejores bazas (cargo o empresa, máster, idiomas).
  • Tablas: ayúdate de tablas para disponer la información (puedes ocultar el borde exterior). Es una forma perfecta de estructurar los bloques. Además, así demuestras que, efectivamente, dominas el paquete Office y su editor de textos, el Word.
  • Elementos gráficos: no dudes en utilizar algún color de forma discreta, puedes añadir líneas para separar bloques e incluso colorear los bolitos para las listas (la forma más legible y agradable de enumerar las tareas que desempeñaste en una empresa o tus habilidades). 
  • Nombre del documento: guarda en documento (en Word o PDF) con tu nombre y especialidad. Cuando se descarga como CV.doc se pierde entre varias decenas de CV.doc, o, peor, queda `machacado´ por el siguiente con el mismo nombre. Ejemplo: Mercedes.Rguez.decoradora.doc 
  • Pie de página: algún especialista en Recursos Humanos nos ha comentado que necesitan un poco de ayuda cuando imprimen los currículums. Añade un pie discreto con tu nombre, tu especialidad laboral, el número de cada página y la cantidad total de páginas que envías. (Ejemplo: Mercedes Rodríguez | Decoradora y diseñadora | Página 1 de 2).   

Existen algunas plantillas en Internet para ayudarte a estructurar el currículum, aunque lo ideal es que seas tú quien establezca un diseño personal que te resulte a ti cómodo y agradable.

Adecuación e interés real por la oferta

¡Ay, esos mailings masivos -al tuntún- enviando el mismo currículum y carta tipo a cualquier oferta! No te ayudan a distinguirte y no cunden. Responde sólo a ofertas que te interesen de verdad, en las que encajes bien, de empresas que te gusten y que despierten tu pasión. Destaca en el currículum que envíes aquellos aspectos que se adecúen mejor a la oferta que contestas.

Haz una carta con un encabezado propio, redáctala especialmente y destaca tu idoneidad para el puesto (usa bolitos y verás qué lógico resulta). Pero no hables sólo de ti: indica también lo oportuna que resulta la vacante –o la empresa- para tu carrera.  Pon la fecha del día, tanto al final del currículum, como en la carta: es un pequeño ardid para indicar que se trata de una candidatura especial y que se ha puesto mucho esmero en prepararla.

Formalidad

Para buscar trabajo necesitas herramientas serias, por ejemplo, una dirección de correo sin seudónimos (lo ideal es que aparezca tu nombre y apellido), y en un servidor de correo considerado serio como gmail. Si estás trabajando, no uses tu cuenta de correo de la empresa para buscar otro trabajo.

Corrección

Casi todos los currículums contienen faltas de ortografía. En español, en inglés, o en francés. No dudes en dejar que alguien experto te lo revise. Cuidado con incoherencias: o pones puntos al final de las frases, o no los pones, pero imponte una norma; escribe ´marketing’ con mayúscula o minúscula, pero no cada vez de una forma.

Seriedad digital

Te van a buscar en Google y lo primero que va a salir es tu perfil de Facebook: ¿está en estado de revista profesional o sólo hay fotos en bares? Quizás sea el momento de revisar tu privacidad y restringir los accesos a tu perfil.

Linkedin es un magnífico escaparate y los selectores lo consultan: antes de lanzarte a la búsqueda, ponlo al día. Si no pones foto en el currículum, Linkedin si es un buen sitio para dejarte ver en tu mejor aspecto profesional: por alguna razón, los perfiles sin foto generan desconfianza.

No añadas tu cuenta de Twitter si sólo lo usas para hacer gracietas, pero si eres un referente y compartes artículos profesionales interesantes, adelante. 

¿Tienes un blog profesionalmente relevante? ¿Has participado en publicaciones online o tienes una carpeta de trabajos que se pueda ver? Incluye enlaces a tu trabajo, pocos lo hacen y es una extraordinaria forma de distinguirte.

Un truco muy práctico: trabajar por módulos

Elaborar un currículum nuevo para cada oferta es muy pesado, pero existe una forma de hacerlo bien ahorrando trabajo: tener un documento base en el que cada punto de “experiencia profesional” es un bloque completo que puedes mover hacia arriba o hacia abajo según te convenga.

Así podrás destacar al principio de la experiencia profesional lo que te acerca más al puesto concreto al que optas y resumir lo que no es especialmente relevante en ese caso. Es más trabajo al principio, pero te permitirá adaptar tu solicitud a cada oferta y maximizar el rendimiento.

 

ENLACES: 

Blog TxM: Currículums de éxito (I): actualízate y véndete bien

Una docena de currículums inspiradores y fáciles de replicar

Malena Mangas, TxM